2.7.06

Lo importante

Hay pocas cosas que me coman más la moral que estar hecha polvo y escuchar un "estás exagerando" o un "no es para tanto".

La vida, como todo, tiene días que es un asco, y los peores días son los que tenemos que reponernos de algo que nos duele mediante el gastado medio de sentarnos, valorar pérdidas y seguir adelante con un "siendo realistas, tampoco era importante"

Lo peor no es cuando te lo dices a tí misma mientras intentas poner buena cara para no tener que dar explicaciones de algo que probablemente nadie entienda, lo peor es cuando al final te decides a contarselo a alguien y te responde con un "me parece que eres un poco exagerada, hija", y tú le sonries con un "ya" mientras te maldices por hablar con blasfemos y algo dentro de tí patalea porque te da igual que no sea importante, porque te da igual que haya cosas que tengan que ocurrir, porque puedes encariñarte de tontadas y puedes querer que ocurran las cosas más absurdas, y el hecho de que objetivamente no sean "importantes" no significan que a tí no te importen, porque la vida está hecha de trocitos de cosas pequeñas y es a esas cosas a las que me abrazo cada noche para lograr amar este mundo y convencerme de que merece la pena levantarse cada mañana y seguir en una sociedad que habitualmente es una mierda pero que de vez en cuando nos regala trocitos de ésos y que es por esos trocitos por los que yo vivo.

Lo siento por el chorreo... de todos modos no era "importante"

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